Este examen evalúa su capacidad para escuchar sonidos. Los sonidos varían de acuerdo con el volumen o fuerza (intensidad) y con la velocidad de vibración de las ondas sonoras (tono).
La audición se produce cuando las ondas sonoras estimulan los nervios del oído interno. El sonido luego viaja a lo largo de las rutas nerviosas hasta el cerebro.
Las ondas sonoras pueden viajar hasta el oído interno a través del conducto auditivo externo, el tímpano y los huesos del oído medio (conducción del aire). También pueden pasar a través de los huesos que se encuentran alrededor y detrás del oído (conducción ósea).
La intensidad del sonido se mide en decibeles (dB):
El TONO del sonido se mide en ciclos por segundo (cps) o Hertz:
Forma en que se realiza el examen
Su proveedor de atención médica puede evaluar su audición con pruebas simples que pueden realizarse en su consultorio. Estas pueden incluir llegar un cuestionario y escuchar susurros, diapasones o tonos de un otoscopio.
Un examen especializado con diapasón puede determinar el tipo de pérdida auditiva. El diapasón se golpea y se sostiene en el aire de cada lado de la cabeza para evaluar la capacidad de audición por conducción aérea. Se golpea y se coloca contra el hueso detrás de cada oído (hueso mastoideo) para evaluar la conducción ósea.
La audiometría proporciona una medición más precisa de la audición. También se pueden realizar otros exámenes
Prueba de todos puros (audiograma). En esta prueba se le colocan audífonos conectados a un audiómetro. Se transmiten tonos puros a cada oído, uno a la vez. Se le pide que haga una señal cuando escuche un sonido. Se realiza una gráfica del volumen mínimo requerido para escuchar. Se coloca un dispositivo llamado oscilador óseo contra el hueso mastoideo para evaluar la conducción ósea.
La audiometría verbal. Esta prueba es para medir su capacidad de detectar y repetir palabras habladas a diferentes niveles de volumen que escucha a través de unos audífonos.
Impedanciometría o immitancia acústica. Esta prueba mide la función del tímpano y el flujo del sonido a través del oído medio. Se inserta una sonda en el oído y se bombea aire para cambiar la presión dentro del mismo a medida que se producen los sonidos. Un micrófono monitorea la manera en la que los sonidos son conducidos a través del oído bajo diferentes presiones.
Volviendo al grado de pérdida en decibelios, hablamos de:
En la de primer grado, entre 41 y 55 dB, necesitan el uso de audífono, que suele proporcionar muy buenos resultados. Sin audífono solo oyen si se eleva mucho la voz.
En las de segundo grado, entre 56 y 70 dB, tienen mayores dificultades en la comprensión y se ayudan de la lectura labial. El uso de prótesis auditivas es imprescindible.
En esta gráfica de audiometría podemos ver los diferentes grados de pérdida auditiva.
Fuente: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003341.htm
https://www.gaes.es/viviendoelsonido/foros/post/1682/el-grado-de-perdida-de-audicion