Las personas con discapacidad auditiva o sordera enfrentan mayores dificultades en cuanto al acceso a la educación formal en entornos regulares, es decir con otros pares oyentes sea en cualquier nivel: inicial, primaria, secundaria y educación superior. Estas dificultades son principalmente de acceso a la comunicación y a la información que les rodea, puesto que al no poder oír, podrían no estar expuestos a toda la información académica durante clase así como en la interacción y comunicación con el o los docentes y con los demás estudiantes en clase.
El hecho de no poder oír, no significa que las personas sordas no puedan aprender, al contrario, generalmente las personas sordas no presentan dificultades intelectuales adicionales a la pérdida auditiva. En este sentido, si son expuestas a la información y a la comunicación de manera visual, podrían acceder a los contenidos y aprender al igual que los demás.
Los estilos de aprendizaje, niveles de comprensión lectora, y sobre todo los niveles de comunicación (expresión oral o expresión en Lengua de Señas) entre las personas sordas son muy diversos, todas ellas dependen de la educación que hayan recibido en casa, las escuelas que hayan asistido, o la estimulación/exposición al lenguaje que hayan recibido.
No obstante, TODAS las personas sordas aprenden y adquieren conocimientos mediante la vista y todo lo que se presenta de manera visible y visual. Los aparatos de amplificación como los audífonos, implantes cocleares, u otros pueden ser de poca o gran ayuda para él o la estudiante, pero no puede considerarse como el único recurso de apoyo para los aprendizajes.
Lo primero que se debe hacer es informarse bien y conocer bien al estudiante con sordera y saber un poco más de sus características, necesidades y sobre todo sobre su estilo de aprendizaje. Para ello, se presentan algunas características y situaciones que se podrían encontrar en dichos estudiantes:
-Para la mayoría de estudiantes con sordera, el castellano es como su segunda lengua. Por lo que sus habilidades y manejo del idioma no es tan fuerte como su lengua natural, que es la Lengua de Señas. Posiblemente se requiera reforzar aspectos gramaticales, vocabulario para un mejor dominio del castellano tanto en comprensión lectora y escritura.
-Lectura labial, o lectura de labios, o también conocida lectura labio facial, es una técnica utilizada en la que se interpreta un mensaje verbal a través de la observación de los movimientos de la cara, boca, labios, y lengua de la persona que le está hablando. La lectura de labios, podría utilizarse como recurso para algunos momentos de comunicación individual, más no para que el estudiante pueda estar leyendo labios durante toda la clase. Diversos estudios señalan que solo se puede captar leyendo los labios aproximadamente un 30% de lo que se dice. Por lo que además de resultar extenuante y cansado para la persona sorda, podría perderse información con facilidad.
-El o la estudiante con sordera podría enfrentar dificultades para participar en actividades grupales o grupos de discusión debido a que muchas veces no se respetan los turnos y pausas que cada uno hable y pueda seguir la conversación si es que se está leyendo los labios todo el tiempo.
-Si él o la estudiante utiliza aparatos de amplificación (audífonos, implantes u otros) pueden tener dificultad de comprensión vía auditiva debido a posibles interferencias de ruidos ambientales fuertes que interfieren en horario de clase (por ejemplo, voces y gritos del recreo de otros alumnos, sonidos como taladro, martillo de construcciones aledañas, clase de música al costado, entre otros).
-Las personas sordas tienen una dependencia y facilidad de atención a todas las señales visuales que se presenten. Por lo que todo lo que se presente de manera visual y/o visible ayudará la comprensión y rápida respuesta o actuación.
-En caso solo haya un o una sola estudiante en la institución educativa, es una posibilidad que puedan aislarse socialmente debido a que podrían enfrentar barreras de comunicación e información que se presenten día a día con otros estudiantes u otras personas dentro de la institución educativa.
-Al solo contar con la lectura de labios como recurso, esto puede resultar extenuante para el estudiante, por consiguiente podrían ser renuentes a pedir ayuda si no han entendido algo o también es posible que los demás que les rodean no tengan la paciencia para repetir una y otra vez lo que les dicen.
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